El Corredor Verde de la carrera séptima pretende aumentar la movilidad sostenible de la capital de país a través de medios de transporte con tecnologías limpias y el aumento de zonas verdes.
De acuerdo con el análisis realizado, el diseño conceptual propone generar a los peatones el 50 % del espacio, no sólo con andenes amplios, sino con 16 nuevas plazas alamedas a lo largo del corredor, que cumplen con las normativas de zonas públicas y accesibilidad universal.
Las bicicletas tendrán un 6 % de la vía; el transporte público tendrá el 29 % del espacio con carriles exclusivos y no preferenciales, y el restante, el 15% es para los carros particulares.
Dentro de las características del diseño presentado se destaca la cicloalameda de 24 kilómetros a lo largo de todo el Corredor con estaciones abiertas, la siembra de árboles nativos y carriles exclusivos para el transporte público electro, así la séptima respirará un nuevo aire.
De otro lado, el cable aéreo conectará el Centro Internacional con Monserrate, los barrios altos de la localidad de Santa Fe y la primera línea del Metro de Bogotá.
El Corredor Verde no sólo intervendrá la vía desde la calle 26 hasta la calle 200, sino que además ya tiene los recursos previstos para integrar en el diseño y la funcionalidad de conexión entre el Corredor y los cerros orientales.
Aquí el informe completo:
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