Se conoció la denuncia de una estudiante sobre un presunto caso de abuso sexual por parte de tres de sus compañeros en una institución educativa de la capital.
La familia la estudiante de 13 años denunció que la menor habría sido víctima de abuso sexual en la institución educativa, hace aproximadamente 4 meses. Al parecer, la menor nunca se atrevió a denunciar porque también era amenazada para evitar que contará sobre la situación.
La madre de la menor afirmó que algo particular le llamó la atención y fue el cambio de comportamiento de su hija, el bajo rendimiento académico y unos dibujos que hacía en sus cuadernos.
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La madre relató lo que la niña le narró:
“Que sí te contaba, ellos me hacían algo más, que si te contaba me esperaban a la salida. Yo le dije: ‘amor, eso no era para que usted se lo hubiera callado. Yo al ver que no me contestaban salgo el mismo sábado para Medicina Legal, allá me reportan para Fiscalía de menores de edad, pongo el denuncio. Estando allá, luego de tomarme los datos, me dicen que el informe va directamente a Fiscalía”, contó la madre de la menor que realizó la denuncia.
La madre afirmó que hace pública esta denuncia teniendo en cuenta que en la última reunión de padres de familia, al parecer varios habrían manifestado que en este colegio había irregularidades con respecto a casos de matoneo y bullying.
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“Esta denuncia que estoy haciendo por Fiscalía, por todos los medios es por lo mismo, porque así como mi hija cayó y está sufriendo ella sola, porque ya lo vivió, así creo que muchas niñas están haciendo lo mismo acá. Porque el día de la reunión de padres muchos dijeron que sus hijos les contaban sobre cosas que estaban pasando, pero muchos se callan por temor y por miedo”, denunció la madre de la estudiante.
Ante el caso, la Secretaría de Educación informó que los familiares de la niña se acercaron a la institución educativa para dar la alerta sobre lo que venía ocurriendo con su hija, pues según la menor, tres compañeros tenían comportamientos indebidos y de violencia contra ella. Posteriormente, identifican que se trataría de un presunto caso violencia sexual y actúan de manera oportuna, dirigiéndose a la Fiscalía y de allí al centro médico donde se encuentra hospitalizada.
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Una vez se conoce la situación, el colegio procede con la identificación de los presuntos ofensores y entabla comunicación con las familias para activar los protocolos.
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