Las multas, impuestas por la Administracion de Enrique Peñalosa y que superan los 500 millones de pesos, son el resultado de intensificar los operativos de control en todas las localidades de la ciudad, diligencias que anteriormente solo se quedaban en cierres temporales sin ninguna sanción económica por exceso de ruido.
A todas estas empresas que desarrollan actividades industriales y comerciales, la Secretaría Distrital de Ambiente les inició el debido proceso sancionatorio por superar los estándares máximos permisibles de emisión de ruido, de acuerdo con la Resolución 627 de 2006.
La norma indica que para los sectores de tranquilidad y ruido moderado el máximo permisible en el día es de 65 decibeles y de 55 en la noche. Mientras que para sectores de ruido intermedio restringido los valores no deben superar los 70 y los 60 decibeles, respectivamente.
Con estas sanciones la Alcaldía Mayor logra reducir el impacto negativo que ocasiona la contaminación auditiva en los sectores más críticos de las localidades de Antonio Nariño, Chapinero, Fontibón, Kennedy, Engativá y Suba.
En la actualidad la Secretaría de Ambiente trabaja en conjunto con la Policía Nacional y las alcaldías locales recogiendo pruebas técnicas que dan sustento para iniciar los procesos sancionatorios ambientales por contaminación auditiva.
La Administración Peñalosa seguirá intensificando los operativos de control a aquellas personas naturales y jurídicas que incumplan la normatividad ambiental en materia de contaminación auditiva, cuyas multas pueden llegar incluso a los 3.600 millones como lo establece la Ley 1333 de 2009.
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