Tres temas clave en materia de medio ambiente contiene el nuevo Plan de Ordenamiento Territorial que está presentando la administración de Bogotá. Se trata de la conservación de la reserva Thomas Van Der Hammen, el arbolado en la ciudad y la calidad del aire.
Según el Distrito, las perspectivas del POT en materia ambiental marcan un antes y un después para Bogotá, pues se amplía en 30 % el corredor ambiental de la capital y se crean nuevas zonas de protección.
“Tenemos por supuesto la consolidación de la reserva Thomas Van Der Hammen que va a quedar como ese gran pulmón, ese gran bosque urbano que es una reserva forestal productora en el norte de la ciudad y que se conecta con los cerros, que abraza a la ciudad por el lado oriental”, manifestó Carolina Urrutia, secretaria de Ambiente.
Además, se han establecido corredores ecosistémicos que no afectan el uso del suelo y para los que se aplicarán lineamientos específicos.
Sobre la economía circular, generarán espacios dentro de la ciudad y en las construcciones para que allí se dé la separación de los residuos sólidos, con el objetivo de que estos se incorporen de nuevo a las cadenas productivas, mientras que se le apuesta a la mejora en la calidad del aire.
“Estamos creando las zonas con un mejor aire que nos van a permitir intervenciones directas en esos lugares de la ciudad que tienen problemas particulares de mala calidad del aire, como lo es por ejemplo Carvajal-Sevillana; ahí vamos a poder hacer intervenciones intersectoriales que nos permitan atacar los problemas de fondo”, aseguró la secretaria de Ambiente.
Según la Secretaría de Ambiente, este POT marca grandes diferencias en materia ambiental frente a los planteados en anteriores administraciones.
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