Un monitoreo permanente adelantan las autoridades distritales y nacionales al relleno Doña Juana, luego del deslizamiento que ha causado malos olores y afectación a los habitantes de esta zona. La Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos hizo un detallado recuento de los incumplimientos que, según la entidad, ha tenido el concesionario encargado del relleno.
La primera falla en la que habría incurrido el concesionario Centro de Gerenciamiento de Residuos Doña Juana CGR inicia "en el primer año de operación, cuando el consorcio debía mejorar la planta de lixiviados y optimizar su tratamiento, así como hacer las obras de estabilización del relleno, poner los instrumentos de geotecnia para detectar movimientos de los residuos dispuestos, construir las vías internas, y tener una capacidad de disposición de mínimo seis meses, entre otras, pero no lo hizo".
Además, entre 2018 y 2019 le fueron impuestas seis multas, sin embargo, los problemas continuaron según la UAESP por lo que decidió impulsar 26 procesos de incumplimiento.
"El incidente más reciente que evidencia la problemática del Distrito con el consorcio CGR es el deslizamiento que se presentó (...), y que correspondería a unas 60.000 toneladas de residuos, el equivalente a 10 días de recolección en la ciudad...".
En el pasado, el operador demandó al Distrito argumentando que no tenía los recursos suficientes para cumplir con los requerimiento contra actuales: "la disputa con el Distrito se resolvió en un laudo arbitral en el 2018, con un fallo en contra del concesionario que le ordenó ejecutar todas las obligaciones del contrato por un valor de 150.000 millones de pesos".
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