Actualmente, en el sistema alimentario de Colombia, la distribución de alimentos juega un papel fundamental en la medida que conecta la producción con el consumo de los alimentos que circulan en el país. 

Esta distribución cuenta con una serie de características y actores involucrados que permiten que se dividan en tres modelos: tradicional, alternativo y moderno, que a la vez manejan una forma de comercialización, distribución y consumos diferentes. 

Estas son las características de cada uno de los modelos y sus diferencias: 

Modelo Tradicional: En este modelo de distribución participan los productores y los intermediarios que ayudan a transportar los alimentos. La cadena comienza por el productor, luego por un transportador y finalmente por el comerciante quien vende el producto al consumidor. 

Dentro de este modelo puede haber hasta cuatro intermediarios y está soportado por una economía familiar de pequeños productores. En las prácticas tradicionales en el momento de cultivar alimentos usan químicos e insecticidas. 

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El modelo tradicional se basa en la venta de alimentos en las Plazas de Mercados, dentro de ellas, en la mayoría de las ocasiones, no hay una relación directa entre el productor y el consumidor, además no hay una asociación entre productores. En este modelo se cuestionan los temas de salubridad, sanidad y ambiente. 

Modelo Moderno: Los grandes supermercados son el eje central de este modelo, los productores deben tener la capacidad económica y crediticia para la producción de alimentos y se caracterizan por tener una mayor capacidad técnica.

Dentro de este modelo se encuentran productos estéticamente refinados y con altos volúmenes de un solo producto, que obliga un uso considerable de químicos y fertilizantes. Al productor de este modelo le corresponde un 30 % de las ganancias.

Este modelo no promueve la asociatividad entre los productores, esto permite que no exista una estabilidad de precios, pero a la vez crea una alta competitividad entre ellos. Otra de las características es el requerimiento de personas capacitadas que distribuyan y comercialicen los productos, además de una tecnificación de los equipos en los hipermercados para el cuidado y conservación de los productos.

Modelo Alternativo: Prevalecen los circuitos cortos, eliminando o reduciendo la intervención de los intermediarios. Dentro de él también existe una relación directa entre el productor y el consumidor. 

Una de las características principales de este modelo es que los productos están libres de químicos, son agroecológicos y las huertas comunitarias son un gran ejemplo de relación directa entre el consumidor y productor. 

Los Mercados Campesinos en Bogotá son un ejemplo de este Modelo Alternativo y la cercanía entre el productor y el consumidor, además de que permiten tener productos mucho más económicos.

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