En horas de la mañana, indígenas Misák, en un acto de protesta, tumbaron la estatua del fundador de Bogotá, ubicada en el centro de la capital. Entre otros argumentos, recuerdan que ya son 190 los indígenas asesinados en este Gobierno.
Sobre las 6 a.m., este grupo de indígenas con banderas y cánticos llegó hasta el centro de Bogotá. Entre varios derrumbaron la estatua de Gonzalo Jiménez de Quesada, ubicada en la Plazoleta del Rosario, protestando; según ellos, por una deuda histórica.
“No más símbolos que dañan y nos revictimizan, además de que ellos despojaron nuestras tierras, nos masacraron, nos asesinaros y violaron a nuestros ancestros. Pues, colocan esos monumentos y no queremos esos monumentos que traen una mala memoria a los pueblos indígenas”, manifestó Didier Chirimusquey, comunero Misák.
Fueron distintas las reacciones por la actuación de los indígenas.
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“Realmente es tremendo que el pueblo indígena nos esté dando ejemplo de estos actos simbólicos de reivindicación”, expresó el ciudadano Jorge Sarmiento.
Los indígenas Misák dicen que esta no será la única estatua que será derribada en este año, aseguran que el siguiente movimiento será en próximos días.
“El mensaje es que nos unamos al Paro Nacional, caminemos juntos, mostremos nuestra inconformidad. Hay una estatua mayor que hay que tumbar, entonces para eso vamos”, concluyó el comunero Misák, Didier Chirimusquey.
Los líderes de esta comunidad denuncian que durante el Gobierno Duque han sido asesinados 190 indígenas en Colombia y que el Gobierno sigue sin darles garantías de seguridad en sus territorios. Una razón que los tendrá en diferentes concentraciones por la ciudad en el marco del Paro Nacional.
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