Era medio día y en una calle de Fontibón, Matilda aullaba del dolor que le causaba una herida su pata derecha. Horas antes un vehículo la había arrollado, y en lugar de ayudarla había huido.

Matilda, quien llevaba viviendo en las calles de esta localidad desde hacía dos años, fue una de las beneficiadas por la atención del Servicio de Urgencias Veterinarias que brinda el Distrito, para los perros y los gatos que viven en las calles.

Gracias al llamado de un vecino a línea 123, la perrita fue trasladada al servicio de urgencias, donde le realizaron una amputación total en la pata derecha.

El programa que brinda atención integral para los animalitos más desprotegidos de la ciudad presta los siguientes servicios: consulta médica, hospitalización, unidad de cuidados intensivos, tratamientos médicos, cirugía especializada y laboratorio clínico veterinario.

Una vez los animales estén recuperados, se vincularán al Programa Distrital de Adopciones. De hecho 78 de los 100 que han entrado por Urgencias Veterinarias ya hacen parte de un hogar.

Aunque Matilda sufrió una pérdida ganó algo muchísimo mejor: Un hogar. Vanesa Rodríguez, quien vive en el municipio de Cajicá y recoge animalitos de la calle, para buscarles un hogar donde los quieran y les briden protección, fue el ángel que le abrió las puertas de la casa a esta perrita.

“Vi la historia de Matilda por la página de Facebook y quede enamora de ella. Le escribí a la persona que estaba encargada, para hacer los trámites de la adopción. Cuando llegó a mi casa no comía y se la pasaba acostada, pero ahora es lo más de juguetona y se la pasa en mi cama”, cuenta Vanesa.

“Tengo buenas noticias para nuestros animalitos de las calles: desde que se abrió el servicio de Atención de Urgencias Veterinarias se han atendido entre 4 y 5 animales diarios. Así protegemos más los perros y gatos vulnerables de la calle”, aseguró el Alcalde Enrique Peñalosa.

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