Con apenas 4 años de edad, Rafael Tenjo tuvo un episodio en su vida que lo cambió para siempre. Sin saberlo, se enamoraría del deporte por completo y gracias a él su vida cobraría un sentido diferente. Conozcamos la historia de este bogotano que es ejemplo a través de sus acciones, un deportista extraordinario:

Dos impactos de bala estuvieron a punto de arrebatarle la vida con a los 4 años. Perdió la sensibilidad desde su pecho hacia abajo, pero con los años, descubriría y desarrollaría otra sensibilidad, la de percibir y comprender el mundo a la luz de los ojos del deporte.

“Empecé como a cambiar la visión de la vida, de la discapacidad, que podía hacer tantas cosas y que no había tenido la oportunidad de hacerlas”.

Y es que la lista es larga. En el 2009 comenzó a practicar la natación. Incursionó en el rugby subacuático aún sin poder usar aletas. Hizo parte del primer equipo paralímpico en Colombia de deportes de invierno, y actualmente es segundo a nivel nacional en atletismo de pista. En pocas palabras, el deporte es su vida.

“Se me han cumplido muchos sueños, como es el viajar, el ser el mejor a nivel nacional. Ganar una medalla. Conocer personas geniales y practicar deportes que nunca en mi vida imaginé”, puntualizó.

Rafael ya está a punto de culminar otra carrera, pero esta vez no en la pista. Trabaja en su tesis, peldaño final para adquirir su título como administrador deportivo.

“Lo que busco con la tesis es dar herramientas, fomentar la investigación y volverme un referente en cuanto a deporte paralímpico en el país desde la parte deportiva y desde la parte de investigación”.

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