El expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, quien fue condenado a 12 años de prisión por corrupción pasiva y lavado de dinero, envió un último mensaje a sus seguidores antes de entregarse a la Policía Federal para purgar su pena.
En un video publicado en sus redes sociales el exmandatario indicó que no tiene "miedo de lo que está por venir". "Mientras me quede al menos un minuto de vida, ese minuto va a ser para luchar por la dignidad de nuestro pueblo y defender nuestro honor", sostuvo.
Lula también se refirió al juez federal, Sergio Moro, quien autorizó su captura y lo condenó a 12 años de cárcel por sus vínculos en el escándalo de Lava Jato. "Quien me condenó sin pruebas sabe que soy inocente y que goberné con honestidad", dijo Lula da Silva.
Lula arribó la noche del sábado a Curitiba, allí durmió en la sede de la Policía Federal. Se espera que este domingo sea llevado a un centro médico para realizarse varios exámenes de salud.
Posteriormente, Lula da Silva será trasladado a la Superintendencia de la Policía Federal de Curitiba. En este complejo penitenciario el expresidente, que pagó 31 días de prisión en 1980 cuando dirigía las huelgas obreras contra la dictadura militar entre 1964 y 1985, tendrá una celda especial de 12 metros cuadrados.
Debido a la dignidad del cargo que ocupó, el exmandatario brasileño estará separado de otros reos.
El líder brasileño fue hallado culpable de recibir un lujoso apartamento en la localidad costera de Guarujá en el estado de Sao Pablo, como parte de pago de un soborno realizado para la construcción OAS, la cual recibió millonarios beneficios de contratos con la petrolera estatal Petrobras.
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