Por primera vez, Gobierno Nacional y Distrito establecen hoja de ruta para atender a las víctimas del conflicto residentes en  la capital del país. Los compromisos de la Unidad para las víctimas y Alta Consejería de Bogotá consisten en adelantar planes de reubicacion con énfasis en las comunidades étnicas que se encuentran en la ciudad.

Voceros del Distrito y Nación, que atienden a las víctimas del país, revisaron las acciones adoptadas para atender a esta población, de cara a la emergencia generada por la COVID-19.

Ramón Alberto Rodríguez Andrade, director de la Unidad para las Víctimas, manifestó que es "importante caracterización por la COVID-19, como también la atención a través de los centros locales en Bogotá, cómo se va a garantizar el tránsito de lo presencial hacia lo virtual, también revisamos algunos temas de reparación colectiva, cómo se puede avanzar en estos momentos de pandemia".

Frente al tema, el alto consejero para los derechos de las víctimas, paz y reconciliación de Bogotá aseguró que en el trabajo articulado, una de las prioridades es sacar adelante el tema de retornos y reubicaciones de las comunidades étnicas que residen en la ciudad.

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"Uno de los compromisos adquiridos por la Unidad para las Víctimas tiene que ver con el acompañamiento a nosotros como Distrito en la voluntad de generar una ruta de retorno y de reubicación étnica para la población Embera en Bogotá, así como para otra poblaciones que se encuentran en la capital, producto de una desplazamiento masivo previo y que han manifestado su voluntad de retorno a sus regiones", aseguró Vladimir Rodríguez.

El Distrito a su vez planteó la necesidad de implementar acciones para la reactivación económica de acuerdo con el Plan de Desarrollo, y en las cuales el Gobierno Nacional aportará recursos.

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