La cifra de muertos por la explosión de un oleoducto en el centro de México, ocurrida el sábado pasado, subió a 85, informaron medios locales el lunes.
En una conferencia de prensa ofrecida el domingo en el Palacio Nacional en Ciudad de México, el secretario de Salud Jorge Alcocer dijo que otras 58 personas fueron hospitalizadas después de la explosión en la tubería que había sido perforada por ladrones de combustible en la ciudad de Tlahuelilpan, en el estado de Hidalgo.
Durante todo el sábado, familias enteras se lanzaron con cubetas para recoger la gasolina que salía de la perforación, hasta que en la noche se produjo la explosión.
Entre los heridos, ocho son menores de edad, informó Alcocer.
La tragedia se originó luego de que habitantes de la comunidad Tlahuelilpan, Hidalgo -ubicada a unas dos horas de Ciudad de México-, extrajeran combustible de un ducto clandestino, debido a que en las últimas semanas el país ha padecido escasez de gasolina.
Esta insuficiencia en las gasolineras se debe a que, desde el pasado 27 de diciembre, López Obrador implementó un megaoperativo en contra de redes criminales dedicadas a robar hidrocarburos, lo que implicó cerrar el flujo de los ductos.
Vía: Anadolu
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