Denuncian amenazas a comerciantes en Bogotá

Desde Fenalco Bogotá-Cundinamarca denuncian que comerciantes de la ciudad iniciaron la semana con sus negocios cerrados a la fuerza, pues han recibido amenazas por no unirse al Paro Nacional. Los mensajes dicen que si abren serán sometidos a un ‘consejo de guerra’.

Fenalco informó que mensajes de WhatsApp han llegado en las últimas horas a comerciantes de pequeños establecimientos del sur de la ciudad, con textos intimidantes prohibiéndoles abrir los locales e incitándolos a unirse al paro.

“Hay muchísima preocupación y un inmenso rechazo a lo que están haciendo unos vándalos en algunos sectores de la ciudad a los comerciantes, a los pequeños tenderos, a los panaderos, a las personas de papelerías pequeñas de los diferentes barrios, que les están llegando diferentes notas a sus teléfonos personales”, comentó Juan Esteban Orrego, director de Fenalco Bogotá-Cundinamarca.

Quien envía los mensajes se identifica como integrante de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y se lee que: “Está prohibido el comercio durante todo el día. Quien no acate las medidas se verá sometido a un consejo de guerra. Estaremos pasando durante el día por barrios y sectores identificando quienes no cumplan, sabemos qué hacen cada uno de ustedes, evítense problemas”.

“El comercio está en una situación demasiado difícil, todos esos pequeños empresarios vienen de un sufrimiento muy grande porque llevamos más de un año en situación de pandemia, ahora con el tema del paro esto se convierte en una situación que es inadmisible”, agregó Orrego.

El gremio hace un llamado a los comerciantes a denunciar ante las autoridades cualquier mensaje o acto violento. También pueden hacer llegar los casos a Fenalco a través de las redes sociales o al correo: servicioalcliente@fenalcobogota.com.co

El gremio que puso este caso en conocimiento de las autoridades señaló que esta situación agrava aún más el estado de los comerciantes y la calificó de terrorismo, indicó que las personas tienen mucho miedo de que sus locales sean vandalizados o, peor aún, que sean atacados en su integridad física.

Su director señaló que necesitan que los dejen trabajar, porque cada ciudadano es libre de participar en movilizaciones y no puede ser obligado.

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