Los cerros de Monserrate y Guadalupe son grandes atractivos turísticos en Bogotá, sin embargo, en medio de ellos, se esconde uno de los secretos mejor guardados de la capital. El páramo de Cruz Verde es el cerro que se esconde entre estas dos montañas que enmarcan el día a día de los capitalinos.
Pocos conocen su nombre y mucho menos la oferta turística que ofrece, al estar ubicado en el antiguo camino real a Ubaque. Desde este sitio se puede observar el nacimiento del rio Fucha y el primer acueducto que tuvo la ciudad.
Para ingresar y pasear por los caminos coloniales, el bosque de pinos, el alto de la Horqueta y el de Cruz Verde debe estar atento a las visitas guiadas programadas por el IDRD.
Se inicia el recorrido en la Carrera 8ª este Nº 12-30 Sur Instituto para niños ciegos, con entrada a la reserva, luego a las estaciones, a través de un camino empedrado.
Esta caminata recreo-ecológica se desarrolla con el fin de promover la actividad física y fortalecer la competencia social-ciudadana cuidando el medio ambiente.
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