Un remate de Lionel Messi en el minuto 30 cruzó la línea de gol antes de que el portero del Valencia lograra despejar la pelota.
El árbitro Ignacio Iglesias Villanueva y sus asistentes no concedieron el gol y el Valencia continuó jugando mientras en el Barcelona celebraban la supuesta apertura del marcador.
"Escándalo", se leía en la portada del periódico Mundo Deportivo este lunes, mientras que la de Sport decía que se trató de un "robo arbitral".
La española es la única de las cinco grandes ligas europeas que aún no utiliza un sistema de video u otro tipo de tecnología para constatar la validez de los goles y así ayudar a los árbitros a tomar correctamente sus decisiones.