El IDEAM había anunciado a principios de marzo que la primera temporada de lluvias se podría extender tres meses. Se creía que en junio iba a finalizar pero las lluvias siguieron en Bogotá a pesar de que el fenómeno de La Niña ya finalizó.
Según el IDEAM, junio es el mes de transición entre la primera temporada de precipitaciones y la segunda temporada de menos lluvias del año, especialmente en la región Andina. Se esperan precipitaciones entre 10 % y 40 % por encima de los registros históricos, especialmente en los primeros quince días del mes.
Con la persistencia de las precipitaciones en algunos sectores de la región Andina, se esperan incrementos de nivel durante este mes en algunos afluentes, particularmente en la región montañosa caracterizados por ascensos súbitos de respuesta rápida a lluvias locales de alta intensidad.
En julio las lluvias se esperan generalmente dentro de la condición normal y por encima del promedio, mientras que, en agosto oscilarían entre las diferentes categorías.
El Instituto Distrital de Gestión de Riesgos y cambio Climático IDIGER prevé que en una semana, es decir después del 15 de junio, las lluvias disminuirán y podría comenzar un temporada menos lluviosa en Bogotá. Sin embargo, entrega recomendaciones a los ciudadanos para prevenir emergencias por cuenta de las lluvias en lo que queda de esta temporada:
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