Foto de: Pixabay
Walter Rodríguez descubrió que un hombre de 29 años estaba enviando mensajes con contenido sexual a su hija de 11 años y decidió continuar con la conversación para atrapar al acosador.
Luego de interactuar con el hombre durante varias horas y evidenciar las fotos y mensajes intimidatorios que enviaba, Walter concretó una cita con el hostigador.
"Me dio la dirección de su casa y yo quería ir a matarlo, porque le aclaré varias veces que tenía 11 años y él seguía” contó el padre al diario argentino Todo Noticias.
Walter asistió al encuentro acordado y cuando vio al hombre le dio una golpiza, le tomó fotografías y lo denunció con la Policía.
El acosador fue arrestado tras el incidente pero luego fue liberado por falta de evidencias. Ahora deberá afrontar delitos por ciberacoso a menores, teniendo en cuenta las pruebas que entregó el padre de la víctima.
“No puedo creer que para que quede preso él tenía que llegar a violar a mi hija, no sé por qué acá funciona todo tan mal que ya está libre porque tengo todas las pruebas, tiene que morirse en la cárcel", continuó el padre en conversación con el diario argentino.
Walter Rodríguez, por su parte, fue denunciado por lesiones personales.
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