"Estamos viviendo la crisis humanitaria más indignante de la historia": Duque ante la ONU

“Vengo con el orgullo de haber sido elegido con la más alta votación de nuestra historia electoral y al mismo tiempo como miembro de una nueva generación de colombianos, motivada por unir a nuestro país en torno a objetivos comunes”.

Con estas palabras el presidente Iván Duque inició su primer discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas que se celebra en Nueva York, en donde resaltó el pacto por la legalidad que propone su gobierno y cómo estas medidas tendrán repercusión en el proceso de paz.

“Nuestro gobierno va a trabajar para que el proceso de desmovilización, desarme y reinserción adelantado en los últimos años salga adelante con éxito. La paz es un objetivo de todos los colombianos y todos, absolutamente todos, vamos a trabajar por ella”, manifestó.

No obstante, aclaró que el gobierno recibió un proceso de paz débil en dos frentes. “Primero está la fragilidad presupuestal: Se realizaron muchos compromisos sin destinar suficientes recursos y segundo está la fragilidad institucional: se creó una dispersa y compleja arquitectura que ha sido hasta ahora incapaz de avanzar eficientemente hacia los objetivos”

Iván Duque también se refirió a la alarmante cifra de cultivos de coca que hay en el país.

Según el presidente, “la tendencia incremental de los últimos cinco años no puede continuar, ya que estas siembras se han convertido en el combustible y el aliciente para que surjan peligrosos grupos armados organizados”.

El jefe de estado además habló de las medidas que se están tomado desde el Congreso de la República para acabar con la corrupción.

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“Desde el primer día de nuestro gobierno presentamos medidas ante el Congreso, y luego en respuesta al clamor popular, hemos puesto en marcha con todos los partidos una ambiciosa agenda. Le demostramos a Colombia y al mundo que somos capaces de unirnos en propósitos nacionales”, refiriéndose a la Consulta Anticorrupción.

Duque concluyó su discurso hablando del masivo éxodo de venezolanos a Colombia y el reto que esto implica para el país.

“Mientras que el conflicto en Siria ha generado un flujo de 600 mil migrantes al año tan solo a Turquía en un periodo de seis años, Colombia, en menos de dos años, les ha abierto las puertas a casi un millón de hermanos venezolanos”, dijo.

“Estamos viviendo la crisis migratoria y humanitaria más indignante de la historia reciente de la región, por cuenta de una dictadura que aniquiló las libertades”, continúo.

Finalmente, hizo un llamado para que todos los países se unan y puedan darle fin a la problemática de Venezuela.

“La comunidad internacional debe pedir de inmediato la libertad de los presos políticos e identificar rápidamente las mejores soluciones a esta crisis y evitar que esta desolación y desesperanza se incrementen”, dijo.