Las fuertes lluvias siguen generando daños en la parte suroriental de Bogotá. En localidades como Usme ya han dejado 11 familias damnificadas, y otras siguen en peligro por deslizamientos de grandes piedras.
Una roca gigante quedó incrustada en el barrio Villa Anita, producto de un deslizamiento por los constantes aguaceros. Un grupo de familias está en riesgo en un sector donde habitan niños.
La piedra pesa unas 50 toneladas y está en una zona bastante empinada. Además, los postes se han inclinado haciendo que aumenten los temores entre los habitantes que viven a pocos metros.
La zona fue intervenida y acordonada por el IDIGER y por los bomberos, pero todavía no se ha decidido el traslado de familias que exigen la ayuda inmediata de las autoridades competentes.
Aquí el informe completo:
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