Ante la alcaldesa Claudia López, se posesionaron este martes Vladimir Rodríguez, como alto consejero para los derechos de las víctimas, paz y la reconciliación; y José Antequera como director del Centro de Memoria, Paz y Reconciliación,
Vladimir Rodríguez es politólogo e investigador y se ha desempeñado como asesor en el Congreso de la República y Consultor en temas de reparación a víctimas del conflicto y diálogo social.
Por su parte, Antequera, quien es abogado de profesión, es hijo de José Antequera, miembro de la Unión Patriótica asesinado en 1989 en Bogotá.
Durante el acto, la alcaldesa ratificó a Bogotá como epicentro de la paz y la reconciliación. El cambio constructivo en Bogotá debe amplificarse a todas las regiones de Colombia, dijo, haciendo referencia a la democratización y a la búsqueda de la paz.
"Desde Bogotá le mandamos un caluroso saludo a los nuevos liderazgos de tantas ciudades en Colombia", enfatizó, destacando el cambio imparable que traen consigo. "Escojamos lo que nos une, en vez de estar fracturados alrededor de lo que muy poco, legitimamente nos divide".
De igual forma indicó: "somos la capital de la Paz y la reconciliación en Colombia, trabajaremos por el fortalecimiento de la institucionalidad con procesos de reparación colectiva para las víctimas y construyendo una Política de Memoria".
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