Un niño de 4 años, que recibió un disparo en la cabeza en medio de un caso de sicariato en la localidad de Bosa, se encuentra fuera de peligro después de recibir una oportuna atención médica en el hospital Occidente de Kennedy.
“El niño llega en malas condiciones, con apoyo respiratorio mecánico, se encontraba bajo sedación con medicamentos y al examinarlo encontramos que tenía dos heridas en el cráneo, entrada y salida del proyectil”, explicó Julio Cesar Sánchez, neurocirujano de la Subred Sur Occidente.
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Para salvarle la vida al menor los médicos debieron realizar un lavado y eliminar el tejido muerto bajo manejo quirúrgico y someterlo a otras 12 horas de cirugía por la presencia de sangrado. Posteriormente fue hospitalizó en cuidados intensivos.
Días más tarde, el pequeño fue llevado nuevamente a cirugía por un desgarro dural, el cual fue reparado.
“El paciente ha evolucionado mejor de lo esperado, porque debido a las lesiones esperábamos una parálisis del lado derecho, pero afortunadamente ha comenzado a mover esta parte del cuerpo, si bien no es perfecto ya está ejerciendo fuerza de 4 sobre 5, es decir, muy cercano a lo normal”, dijo el neurocirujano.
Al menor se le debió retirar una parte del cráneo, debido a la complejidad de la cirugía, donde después de tres o cuatro meses se le colocará una prótesis ósea para que pueda llevar una vida normal.
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