Rafael llegó con su familia desplazado de Cali a la ciudad de Bogotá en 2004, durante años vio en las calles de la capital la pobreza que se camuflaba en las zonas más populares.
Un día en 2010 recordó a la señora que vivía al lado de su casa junto con sus hijos y a la que le ofreció algo de comer, así que con un amigo empezó la iniciativa de repartir chocolate y pan.
Su iniciativa se ha fortalecido con el pasar de los años, gracias a los aportes voluntarios han logrado llenar de sonrisas con sus chocolatadas y otros regalos a más de 1.000.000 personas.
"El 11 de febrero de 2010 mi papá preparó la primera chocolatada, repartimos con mi amigo Luis Enrique Murcia y vamos a repartir por el centro, esa noche fueron 300 chocolates y 300 panes", dijo Rafael Ortiz, fundador de Chocolate y Pan con Humildad.
La música también ha sido una fuente de inspiración para él, el rap lo llevó a conocer la calle e identificar las necesidades de los más vulnerables, a querer eliminar las brechas sociales y generar un cambio.
"La gratificación es ver las sonrisas de los niños, es ver reflejado el trabajo que nosotros hacemos en la felicidad, en aportar al cambio, en brindar una ayuda y en que muchas más personas se integren y se sientan identificadas con la filantropía", dijo el fundador.
Espera contar con más voluntarios que quieran unirse a las jornadas nocturnas y seguir ayudando a miles de personas.
Aquí el informe completo:
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