En el Chorro de Quevedo se ha presentado incomodidad por parte de propietarios de establecimientos públicos por la ocupación de la plazoleta, por ahora buscan una salida por el bien de todas las personas que confluyen en este lugar.
La Secretaría de Desarrollo Económico pide a los comerciantes una articulación con cuenteros y personas que venden chicha en la plazoleta del Chorro de Quevedo, sin embargo, los comerciantes se declaran en desobediencia civil.
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“Nos declaramos en desobediencia civil porque hay una propuesta con una plataforma que no nos conviene ni beneficia al comercio. El único mecanismo legal que nos queda es la desobediencia civil para exigir nuestro derecho fundamental al trabajo y a la igualdad”, Fernando Bastidas, comerciante.
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Los comerciantes aseguran que tienen una propuesta colectiva en la que se incluye a todos los actores del Chorro de Quevedo teniendo en cuenta que es un bien de interés patrimonial, cultural, histórico y turístico.
Aquí el informe completo:
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