Directora de la UAESP asegura que hay un desorden operativo en Doña Juana

La directora de la Unidad Administrativa de Servicios Públicos de Bogotá denunció que hay un desorden operativo que no va a permitir que los residuos que se deslizaron en el relleno Doña Juana sean dispuestos de manea adecuada en poco tiempo. En las próximas horas, miembros del Puesto de Mando Unificado que monitorea la zona, revisará la situación debido al alto riesgo de nuevos deslizamientos.

Para Luz Amanda Camacho, directora de la UAESP, en el relleno Doña Juana es latente la posibilidad de un vertimiento indebido o inadecuado de lixiviados, que son los líquidos que se producen luego de la descomposición de la basura. Aseguró que en este momento no hay dónde disponer los residuos que descendieron con el derrumbe.

"Hay unos residuos que se cayeron de ese deslizamiento, a dónde va a ir esos residuos, si en este momento no tienen dónde disponerlos porque la celda que tienen de disposición hoy es la que están usando para la operación diaria".

Según la funcionaria, el espacio adicional que debió ser dispuesto para atender una contingencia de seis meses nunca fue construido a pesar de que está previsto en el contrato, además, una terraza donde el concesionario debería de disponer los desechos está atrasada desde que comenzó el año: "ellos se llevan comprometiendo con esta celda desde el mes de enero, después dijeron febrero, después dijeron marzo, después abril, y ahora dijeron mayo, que el 13 de mayo con toda seguridad, pero con ese toda seguridad ya lo han dicho como cuatro veces".

En la zona se han adelantado tres sobrevuelos sobre el Relleno cuyos resultados se conocerán este miércoles. La directora de la UAESP aseguró que se hará todo lo que sea necesario para que se cumpla lo estipulado en las obligaciones que tiene el consorcio encargado del Relleno: "es que nosotros tenemos un contrato y aquí los que pagamos somos todos nosotros por ese servicio, entonces ese servicio se debe de dar bien o si no para qué pagamos la tarifa".

Para la Contraloría General de la República, en la actual coyuntura no se tiene una cuantificación del estado real de los rellenos sanitarios del país y su capacidad para recibir nuevos desechos.