En Puntos Capitales analizamos las consecuencias del cierre de fronteras por parte del gobierno venezolano

Carolina Jiménez, internacionalista experta en Derechos humanos, habló con Santiago Rivas sobre las implicaciones que trae el restringir el paso de ciudadanos a su propio país por parte del Gobierno de Nicolás Maduro.

Según cifras entregadas por Migración Colombia, entre 70 mil y 90 mil venezolanos han retornado a su país durante estos meses de pandemia. Para Carolina Jiménez, esta cifra demuestra que las personas que han regresado a su país lo hacen en un estado de vulnerabilidad y que necesitan atención por parte del gobierno venezolano.

''Hay que tener en cuenta que cada persona tiene derechos, y está en peligro su seguridad, su vida digna y su salud’’, señala Carolina Jiménez, quien asegura que el Gobierno de Nicolás Maduro no tiene la suficiente capacidad para atender a todos los venezolanos que han retornado.

El Gobierno venezolano estableció crear centros de alojamiento en donde las personas que regresan a Venezuela se deben internar allí como parte de los protocolos de seguridad que están establecidos.

''Las personas que regresan son más de las que el gobierno esperaba y sobrepasan los centros de alojamiento que son vigilados por agentes militares’’, enfatiza Carolina Jiménez.

Para la especialista, que el gobierno venezolano cierre sus fronteras para no permitir el ingreso a sus propios ciudadanos es una clara violación al derecho que las personas tienen de retornar a su país de origen.

Por último, Carolina Jiménez también subrayó que la movilización de los migrantes en el territorio colombiano también ha sido difícil porque se les ha estigmatizado por parte de las mismas autoridades. ''Hubo una gestión complicada en la movilidad de venezolanos dentro de Colombia. Muchos gobernantes hicieron comentarios de estigmatización y dijeron que muchos migrantes llevaban el contagio de la COVID-19''.

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