Médicos de bogotá preocupados por la declaratoria de Alerta Naranja

Ante el aumento en el número de contagios en los últimos días en Bogotá, el Colegio Médico insistió en reforzar las medidas de autocuidado que protejan la salud y vida de las personas. La salida sigue estando en nuestras manos y no es momento de bajar la guardia.

Los médicos de Bogotá están preocupados por la declaratoria de Alerta Naranja hospitalaria en las unidades de servicios de salud del suroccidente de la ciudad.

El médico Sergio Zuñiga, miembro de la junta directiva del Colegio Médico de Bogotá, aseguró que: "estas tres acciones orientadas en el marco de la Alerta Naranja, significan que la situación es crítica debido a que la red hospitalaria de servicios en esas localidades es crítica y podría colapsar. Esto deriva en un riesgo inminente de que otras localidades puedan afectarse en el mismo sentido, debido a la natural relación habitacional, laboral y comercial de la gente entre las distintas localidades".

El llamado de alerta ciudadana en Bogotá obedece al significativo aumento de casos de COVID-19 lo que para ellos demuestra, que en últimos 15 días los ciudadanos se relajaron, dejándole la responsabilidad a los trabajadores de salud que hoy no dan abasto en los hospitales de la red publica del sur.

"En Bogotá, en el mismo tiempo, pasamos de 4.306 a 7.386 personas contagiadas con COVID-19. Entre los trabajadores de la salud, durante el mismo lapso de tiempo, se pasó de 713 a 998 trabajadores contagiados en el país, y de 272 a 340 en Bogotá", aseguró el médico Zuñiga.

De igual forma, desde el Colegio Médico de Bogotá llaman al Gobierno Nacional y distrital para que inicie una campaña pedagógica inmediata sobre el uso correcto del tapabocas y medidas de autocuidado sobre todo con la población que vive de la venta informal: "exhortamos al Gobierno Distrital a ocuparse de manera pronta de los trabajadores informales,y de ayudarles con elementos de protección personal y en la educación de su uso".

A su vez, extienden un llamado a los colegas a ser rigurosos en los protocolos de atención, y a que continúen exigiendo los elementos de protección personal a empleadores y ARL las cuales, según ellos,  no han cumplido de manera completa con la entrega de los elementos de bioseguridad.