Rosa María Sánchez, la primera deportista de esgrima paralímpica en Colombia, visitó Ellas Dicen con Patricia López, para contar su historia de vida y el motivo por el que llegó a ser una deportista ejemplar en nuestro país.
Rosa siempre quiso ser miembro de la Policía. Desde que era niña tenía la vocación de servir a las personas y perseguir su sueño la llevo, incluso, a enfrentarse a su familia.
"Antes de terminar mi bachillerato todo el mundo me preguntaba qué quería hacer y siempre respondí que quería entrar a la Policía. Desde ahí empece la lucha contra mi familia y la gente, me decían que no era una carrera para mujeres", menciona.
Su carrera en la institución la llevó a estar al mando de un CAI que fue atacado el 8 de mayo de 1994, el día de las madres. El turno de Rosa era el nocturno y sobre la media noche fue sorprendida, junto con su compañero, por un ataque.
"Esa noche fueron creo que minutos, segundos... no lo sé, el tiempo no lo puedo medir. Yo solamente me di cuenta que una persona me apunto, me disparó y me quedé en el piso", añade.
Sánchez recibió otro impacto cuando estaba en el suelo, esa bala fue la responsable de que la mitad de su cuerpo dejara de sentir.
Después del atentado, Rosa encontró en el deporte la mejor manera para seguir con su vida y cumplir tus sueños. Inició en el tiro paradeportivo, donde logró ser campeona nacional en pistola de aire y subcampeona en rifle.
El esgrima llegó a su vida gracias a una dotación de la Embajada de Estados Unidos a la Policía Nacional para que se creara el esgrima paralímpico en Colombia.
Conoce su historia ahora mismo.
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