Las empresas de transporte especial han tenido pérdidas por 1.000 millones de pesos debido a las marchas y los bloqueos de las vías. Esta cifra se suma a las que ha tenido el sector a causa de la pandemia. En total, este transporte reporta 1,7 billones de pesos en pérdidas.
El gremio de transporte especial señaló que las pérdidas que deja la pandemia, y que agravan las marchas, no se podrán superar antes de cinco años.
Los conductores que, en su mayoría son propietarios, estaban ilusionados de poder trabajar, pero sus planes se frustraron.
“Lo que no nos pueden impedir a nosotros es la movilidad de los colombianos, la movilidad de los bogotanos, la movilidad de los cundinamarqueses. Nosotros como empresarios requerimos la reactivación económica que habíamos planeado con el Gobierno Nacional”, sostuvo Lupoani Sánchez, presidente ejecutivo de Acoltés.
Han salido a transitar menos del 20 % de los vehículos habilitados para prestar este servicio, entendiendo que el 80 % es de transporte escolar.
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Del parque automotor del país, que en su gran mayoría son microempresas, el 70 % trabaja en Bogotá y Cundinamarca. Son cerca de 60.000 vehículos en 700 empresas de la región.
“Son más de 60.000 conductores, más de 50.000 monitoras que han dejado de trabajar. Estamos hablando de más de 100.000 personas que hoy no pueden trabajar”, concluyó el presidente de Acoltés.
Señaló el directivo que el turismo está seriamente afectado por el temor de las personas a quedar en medio de una movilización. Asimismo, informó que se están perdiendo las oportunidades de reactivación que impediría que sobrevivan las microempresas.
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