Este jueves, a pocos días de dejar la presidencia, Juan Manuel Santos por última vez en su cargo reunió al exjefe guerrillero Rodrigo Londoño y al equipo del Consejo Político de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC). El encuentro se dio a puerta cerrada en la Casa de Nariño.
En la reunión, el presidente, junto a sus asesores de gobierno y los miembros del Consejo realizaron un balance y sacaron las conclusiones de los resultados obtenidos en materia de paz, de acuerdo a la implementación del Acuerdo de Paz firmado entre el Gobierno Nacional y la antigua guerrilla en el 2016, luego de más de 50 años de conflicto.
El equipo del nuevo partido Farc tuvo la oportunidad de expresarle al jefe de Estado las preocupaciones por las modificaciones que pretende realizar el próximo gobierno del presidente electo, Iván Duque.
Igualmente, le pidieron a Juan Manuel Santos seguir defendiendo los acuerdos desde fuera de la presidencia y dialogaron sobre las inquietudes de lo que pasará en materia de justicia, protección de los excombatientes, recursos para la paz y la reparación a las víctimas.
De acuerdo con el ministro del Interior Guillermo Rivera los dos equipos se desearon éxitos en lo que vendrá para los próximos años.
Rivera indicó que fue una reunión de cierre de las actividades que se han venido realizando en el gobierno Santos, en materia normativa del Acuerdo de Paz y la reincorporación, así como los avances en participación política y justicia, a partir de que comenzó la comparecencia de los implicados en el conflicto ante la Jurisdicción Especial para la Paz.
Sin embargo, para muchos este encuentro no tuvo relevancia, debido a que se trata de un partido político, pero muchos mencionan que se trata de un acto histórico porque es la primera vez que los miembros de la antigua guerrilla ingresan al palacio presidencial.
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